Los lazos entre el Principado de Mónaco y Martinica se reforzaron en 2017 y 2018 con dos hechos destacados:
Hoy en día, tenemos suficiente perspectiva para saber que las reservas marinas y las áreas protegidas son el mejor medio de regular la sobrepesca y proteger los ecosistemas...
Las zonas marinas protegidas contribuyen a preservar los entornos marinos y la biodiversidad, acercando a las personas y al mar de forma responsable.
El 27 de octubre de 2017, S.A.S. el Príncipe Alberto II de Mónaco viajó al norte de «l’île aux fleurs» para inaugurar la Reserva Natural Territorial Marina Prêcheur Albert Falco y rendir así homenaje a la memoria del capitán del Calypso, fiel compañero del capitán Jacques-Yves Cousteau.
Esta visita simboliza el firme compromiso del Principado con el desarrollo de las Áreas Marinas Protegidas en todo el mundo.
Actualmente hay 16.927 Zonas Marinas Protegidas en el mundo.
Actualmente cubren una superficie de 28.189.691 km2, es decir, el 8% de la superficie total de los océanos.
Menos del 3% de estas zonas están bajo protección estricta, y la recolección está prohibida.
Los expertos científicos recomiendan encarecidamente que se proteja al menos el 30% de la superficie de los océanos para 2030.
Este es el objetivo que debe alcanzarse para la gestión sostenible y la protección eficaz de la biodiversidad marina.
Famoso submarinista y capitán del Calypso, el barco del capitán J-Y Cousteau, Albert Falco fue uno de los impulsores del proyecto de Reserva Natural Territorial del Prêcheur, que hoy lleva su nombre.
Este amante del mar y de Martinica dejó su huella en todos los que tuvieron el privilegio de trabajar con él.
El pueblo de Martinica no ha olvidado su compromiso con la protección y promoción del patrimonio subacuático de la isla.
Cinco de las siete especies de tortugas marinas se encuentran en el litoral de Martinica.
De ellas, tres especies se observan con mucha regularidad: la tortuga carey, la tortuga laúd y la tortuga verde, la más común en esta zona.
En el suroeste de la isla, las Anses d’Arlet son la principal zona de alimentación de las crías inmaduras de esta especie.
Aquí es donde los científicos las estudiaron principalmente durante la misión de octubre de 2018.
Dos intensas semanas de trabajo científico in situ, ricas en enseñanzas e información, contribuyeron a mejorar el conocimiento y la protección de esta especie.
Se utilizaron tecnologías innovadoras que combinaban cámaras a bordo y objetos conectados.
Las dos semanas también brindaron la oportunidad de sensibilizar a las generaciones más jóvenes.
Damien Chevallier (IPHC) ha descubierto que las tortugas verdes nacidas en la costa de la Guayana Francesa pasan varios años creciendo en los lechos de hierbas marinas de las Antillas, sobre todo en el yacimiento de Anses d’Arlet.
Cada año se toman microfragmentos de carne, piel y caparazón de varios individuos.
El análisis de estas muestras nos ayuda a comprender mejor los orígenes de los individuos y el estado de salud de esta población.
Se puede detectar la presencia de contaminantes o virus.
Las tortugas se capturan en apnea y se llevan a la superficie.
Como una huella dactilar real, el número, la posición y el patrón de las escamas de la cabeza son únicos y permiten identificar a un individuo.
Fotografiando el perfil de la cabeza de una tortuga, podemos «archivarla» y reconocerla a lo largo del tiempo, en caso de nuevo avistamiento o captura.
Este método fue desarrollado por Kelonia, el observatorio de tortugas marinas de Reunión.
También se utilizan microchips electrónicos que se inyectan bajo la piel.
En caso de recaptura, permiten el reconocimiento inmediato.
Las tortugas heridas son rescatadas y reciben cuidados especiales.
Aquí, el equipo de científicos tomará las medidas necesarias para retirar el anzuelo de la boca de esta tortuga verde, antes de devolverla al agua.
En otros casos, los buceadores intervienen para liberar a un individuo atrapado en una red de pesca.
Las redes abandonadas o perdidas, conocidas como redes fantasma, son la causa de una mortalidad importante.
Actualmente es un problema importante en todo el mundo.
Iniciado y apoyado por Ifremer, NExT implica una estrecha colaboración con el Institut Pluridisciplinaire Hubert Curien (CNRS – Universidad de Estrasburgo) y Explorations de Monaco.
Se divide en varias fases:
¡No te preocupes!
Esta mochila de alta tecnología puede desprenderse al cabo de unos días y no ocupa mucho espacio con la tortuga.
Varios ejemplares han sido equipados con «biologgers», un sistema que combina una cámara de alta resolución con varios sensores (acelerómetro, magnetómetro, giroscopio, medidor de profundidad, termómetro, hidrófono, GPS) y una baliza Argos que puede utilizarse para localizar a la tortuga en mar abierto, una vez liberada automáticamente.
Imágenes en bruto…
Las imágenes grabadas permiten estudiar a voluntad el comportamiento natural de las tortugas y sus hábitos alimentarios, y comprender mejor su conducta y sus estrategias de adaptación al medio.
Al final de esta grabación, puede verse a una tortuga alimentándose sigilosamente mientras la otra está sujeta a una rémora, o pez piloto.
En Anses d’Arlet, las tortugas verdes jóvenes se alimentan principalmente de algas y plantas marinas, incluida la Thalassia testudinum, conocida comúnmente como «hierba de las tortugas».
Esta dieta herbívora colorea la grasa de las tortugas verdes.
De ahí su nombre.
En los últimos años, una planta invasora originaria del Mar Rojo, Halophila stipulacea, ha colonizado estos lechos.
El comportamiento alimentario de las tortugas en relación con este nuevo recurso es uno de los temas de un estudio a largo plazo del CNRS.
En 10 días de muestreo, se marcaron y siguieron 40 tortugas verdes.
Se tomaron 250 muestras y se grabaron 30 horas de vídeo.
Los valiosos datos e información recogidos durante estas operaciones de campo en Martinica se suman a los datos de años anteriores.
Tras una fase de análisis e interpretación, permitirán a los equipos científicos avanzar en diversos campos científicos.
Para sensibilizar a la población local sobre el trabajo de los investigadores y la conservación de las tortugas marinas, se han adaptado determinados procedimientos y protocolos científicos para que se lleven a cabo en tierra y lleguen a un público amplio.
La protección de las tortugas es asunto de todos, y hay muchas iniciativas en este sentido.
El trabajo realizado en Martinica puede contribuir significativamente a los programas de conservación de las tortugas mediante los dos enfoques esenciales y complementarios de la investigación científica y la educación.
Exploraciones de Mónaco quiere dar las gracias a
S.A.S. el Príncipe Alberto II de Mónaco
El Gobierno de Mónaco
La viuda Albert Falco y su familia
Las autoridades y representantes oficiales de Martinica
El prefecto Franck Robine y su equipo; el subprefecto de Saint Pierre y La Trinité, Emmanuel Baffour, Dominique Vian,
Vicealmirante René-Jean Crignola, Comandante de las Fuerzas Armadas en las Antillas francesas; Coronel François Agostini, Comandante de la Gendarmería; y Capitán Marc Formentel, de la Sección Aérea de Fort-de-France,
Marcelino Nadeau, alcalde de Le Prêcheur,
Louis Boutrin, Consejero Ejecutivo,
Gabriel Jean Guy, Presidente de la asociación de pescadores Prêcheur,
Marie-Renée Queuille, concejala de Anses d’Arlet,
Departamento de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda; Fabien Védié y Denis Etienne,
Office National des Forêts; Francis Georges, jefe de la unidad territorial sur y sus colaboradores: Maxym Sikora y Marie-France Bernard, jefes de proyecto, plan de acción nacional para las tortugas e iguanas marinas en las Antillas Menores,
Equipos de científicos
Damien Chevallier, investigador del Instituto Pluridisciplinar Hubert Curien (CNRS/IPHC – Universidad de Estrasburgo), Departamento de Ecología, Fisiología y Etología, y su equipo: Jordan Martin (ingeniero de investigación), Sidney Regis (ingeniero de investigación, apnea), Nicolas Lecerf (ingeniero de investigación, apnea), Flora Siegwalt (estudiante de doctorado), Lorène Jeantet (estudiante de doctorado), Cédric Frouin (apnea).
Jérôme Bourjea, biólogo de pesca y conservación (Ifremer, UMR MARBEC), Sylvain Bonhommeau, investigador en ecología marina, y Pierre Gogendeau, ingeniero electrónico, (delegación de Ifremer para el Océano Índico) y Emmanuel Thouard y sus colegas (delegación de Ifremer para las Antillas francesas).
Asociaciones y organizaciones locales en Martinica
Abdelwahab (Wahé) Benhalilou, (Ti Payot’ y Plongée passion, asociación POEMM) y su equipo: Thomas Maillet, y Lucas Andreani, Céline Murgale y el personal de Ti Payot’,
Mathilde Brassy, responsable de la unidad «mar y desarrollo sostenible», y Laurie Paquemar, Carbet des Sciences, centro de cultura científica, técnica e industrial de Martinica,
Didier Puccini, periodista†(Francia Antillas) y Muriel Lepori,
Alexandre Arqué (Asso-Mer y Office de l’eau Martinique), Célia Ortole y Gwénael Quenette (Asso-Mer) y Gaelle Lambert (Mon école, ma baleine),
Lyne-Rose Beuze, conservadora del Museo del Padre Pinchon, responsable de museos de la colectividad regional de Martinica,
Los responsables de las clases del espacio educativo marino: Sino César, Carine Croisan, Jean-Paul Joyau, Béatrice Mas-Palangie, Chantal M’Quiby, Régine Toucanon, (Le Carbet); Françoise Figueres, Michèle Rollin y Rolande Menil (Les Anse d’Arlet), Fabiola Nicolas-Bragance, Yoanna Paulin y Karla Jubenot (Fort de France) y sus alumnos, así como la clase de Christel Laurent de la escuela de Morne Vert.
– Las personas implicadas en la organización de las misiones de Martinica:
Philippe Brousse, jefe de la misión caribeña de Exploraciones de Mónaco,
Corinne Bussi-Copin, Consejera Científica, Instituto Oceanográfico – Fundación Príncipe Alberto I, Príncipe de Mónaco,
Coronel Bruno Philipponnat, representante oficial de SAS el Príncipe Alberto II de Mónaco
Thierry Apparu y Liz Factor, comunicaciones.
